La ansiedad es un sistema de alerta muy útil. Pero a veces se sale de control y genera los llamados ataques de ansiedad o de pánico. Veamos por qué sucede y qué hacer ante un ataque de ansiedad.
Parece paradójico, pero la ansiedad es la mejor arma contra el estrés. La ansiedad nos permite mantenernos enfocados, listos para actuar y enfrentar amenazas potenciales. Cuando es excesiva, pueden producirse ataques de pánico, provocando algunos síntomas psicofísicos que nos ponen en aprietos.
Ataque de ansiedad: las mejores formas de calmarse
Cuando ataca la ansiedad, es importante aprender a controlar la respiración y recordar que los ataques son solo temporales.
La respiración puede ayudar a encontrar el equilibrio momentáneo, pero a través de un camino individual será importante empezar a entender que huir de la ansiedad no puede permitirnos superar el miedo a estos ataques. Respirar y reducir inmediatamente el nivel de ansiedad ciertamente puede calmar a la persona en el momento, pero no es la ‘solución’ del problema.
Ataque de ansiedad: las mejores formas de calmarse
Si eres una persona nerviosa o conoces a alguien que sufre ataques de ansiedad, presta atención a este artículo. A continuación, damos consejos sobre cómo actuar cuando la ansiedad ataca.
¿Qué es un ataque de ansiedad?
Al principio, queremos aclarar qué significa un ataque de ansiedad. Esto nos permite identificar si la persona en cuestión realmente está experimentando ansiedad o no.
Los ataques de ansiedad ocurren con más frecuencia de lo que piensas. Por lo general, ocurren cuando el cuerpo produce demasiada adrenalina, que se libera en el torrente sanguíneo.
A menudo surgen del miedo. Debemos recordar que en casos irracionales, es posible que no sepamos qué lo está causando o cómo controlarlo.
En medio de las convulsiones, suelen durar de 15 a 30 minutos. Los ataques de pánico duran aproximadamente el mismo tiempo.
Te recomendamos leer: 6 formas de empezar bien el día y vencer el estrés y la ansiedad
¿Qué hacer cuando la ansiedad ataca?
- Aprende a reconocer los síntomas
Cuando una persona sufre ansiedad, suele deberse a varios motivos que acaban estresándole hasta el punto de que ya no puede gestionarla. Pero como mencionamos anteriormente, no siempre hay una razón lógica o real para esto.
Los síntomas físicos se sienten durante el ataque. Específicamente, las personas que sufren ataques de ansiedad suelen experimentar lo siguiente:
- Palpitaciones, palpitaciones o taquicardia.
- Transpiración.
- Temblores finos o grandes sacudidas.
- Dificultad para respirar o sensación de asfixia.
- Sensación de asfixia.
- Dolor o malestar en el pecho.
- Náuseas o molestias abdominales.
- Sentirse mareado, inestable, «aturdido» o desmayarse.
- Escalofríos o sofocos.
- Parestesias (entumecimiento u hormigueo)
- Desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (sensación de estar desprendido de uno mismo).
- Miedo a perder el control o «volverse loco».
- Miedo a morir.
- Controla tu respiración
Es importante reconocer los síntomas y aprender a respirar correctamente. La respiración es una de las formas más importantes de controlar los ataques de ansiedad.
Si controlamos nuestra respiración, también podemos controlar nuestro ritmo cardíaco.
Sigue estas pautas para una respiración adecuada:
- Inhala profundamente durante 5 segundos
- Contén la respiración durante 7 segundos
- Exhala durante 8 segundos.
Repite este ciclo durante 5 minutos o tantas veces como sea necesario.
- Trata de borrar los pensamientos negativos de tu mente.
Los ataques de ansiedad a menudo se asocian con pensamientos negativos constantes. Por lo tanto, es importante saber cómo dejar de pensar en ello.
Para deshacerte de las repeticiones, necesitas respirar y hacer los ejercicios de respiración mencionados anteriormente para pensar en positivo y dejar atrás la energía negativa.
- Repite frases tranquilizadoras
Usa frases tranquilizadoras para calmarte a ti mismo o a la persona que sufre un ataque de ansiedad.
Cada persona puede tener una frase particular que más le convenga. La idea principal es encontrar una frase que tenga un efecto calmante para acabar con el ataque de ansiedad.
Por ejemplo, repítete a ti mismo repetidamente que todo está bien y que no hay nada por lo que estar nervioso.
También es bueno saber que te calmarás y sucederá en segundos.
Recuerda que la situación está completamente bajo tu control.
- Encuentra un lugar seguro
Si no estás seguro en tu propia casa, busca un lugar donde puedas experimentar un ataque de ansiedad de manera segura. Sentir que estás expuesto al público solo te pondrá más nervioso.
Lee también: Limita tu propio espacio en las relaciones
- No huyas
Es importante saber qué hacer durante un ataque de ansiedad. No debemos ignorar lo que no debemos hacer.
No huyas. Huir de la situación solo alimenta el miedo.
Solo concéntrate en tu respiración y el ataque de pánico pasará en minutos y estarás bien nuevamente.
- No recurras a rituales
No asocies la curación de un ataque de ansiedad con un ritual que no tiene base científica. Al hacerlo, está creando una superstición que normalmente no creerías. Solo te volverás más ansioso.
De hecho, los problemas de ansiedad desaparecen por sí solos.
En relación con la calma, es importante darle tiempo y aprender a respirar correctamente.
Utiliza estos consejos para controlar y detectar un ataque de ansiedad.