Mi querida Elena Francis:
Resulta que es que estoy pasando los peores días de mi vida.
Llevo más de 20 años casada tengo 46 y mi marido y yo nos hemos querido con locura y eso que hemos pasado muchas dificultades, pero siempre queriéndonos como locos y siendo para todos la típica pareja ideal.
Él es muy buena persona y lo ha dado todo por mí y ha sido maravilloso, pero hace 3 meses empezó a cambiar, dijo que quería salir con sus amigos de vez en cuando… y bueno… en una salida conoció a una chica y se dieron los tfnos.
Me dice que fue una atracción muy fuerte.
Total que me ha contado que ha estado con ella mes y medio y que cuando llevaba una semana le dijo que estaba casado con dos hijos y la tipa no lo dejo lo engatusó mas.
Y resulta que me dice que se han visto muchas veces y que se ha enrollado, pero que las relaciones sexuales fueron pésimas, pues él no podía consumar, pues tenía remordimiento y se acordaba de mi y que no podía aguantar más el daño que me estaba haciendo y que no podía perderme, pues soy el amor de su vida, pero no sé lo que no sabe que es lo que le ha pasado que se ha cegado con una chica guapísima, rica y que le colmaba de atenciones, pero que ya se acabó que ha sufrido mucho para decírmelo, pero que ha sido sincero y me ha contado todo y que me sigue queriendo más que a nada en todo el mundo.
Yo creía morirme, se me vino el mundo abajo, lo pase unos días muy mal, pero valore los 20 años que nos hemos amado y lo que nos queremos todavía y no lo iba a dejar por esa aventura, ahora está todo muy reciente y no confío nada en él.
Mi hija de 21 años, que se ha enterado de todo, no le habla, le odia, y quiere que lo eche a la calle, él sufre muchísimo y pide perdón todo el día, pero mi hija se ha ido de mi casa para la de su tía, y sigue con su cabezonería e insultándome a mí por haberle perdonado.
Nosotros estamos intentando luchar por nuestro amor, y queremos estar juntos, pero entre mis dudas y mi hija está siendo imposible.
Dime Elena, si debo luchar por este amor tan grande que siento. ¿Qué hago si le vuelve a llamar?, y ¿qué hago con la cabezonería de mi hija?
Un saludo de tu amiga Liliana. Y muchas gracias.
